La ilusión óptica de Jastrow fue descubierta en 1889 por el psicólogo estadounidense Joseph Jastrow.
Esta ilusión nos induce al error al considerar que una de las figuras que presenta tiene mayor tamaño que la otra, cuando en realidad ambas son del mismo tamaño.
En algunas variaciones, se les ha dado color para crear efectos de contraste a cada pieza de la figura y así acentuar su tamaño, ya que, al darle un tono más oscuro a cualquiera, esa parecerá de menor tamaño
Esta ilusión óptica es una más del repertorio que viene a confirmar que todo en la realidad no es tal como creemos que lo percibimos, o al menos no es tan simple como nuestros ojos creen verlo.
La ilusión de Jastrow
Las ilusiones ópticas, y en ella se incluye la ilusión de Jastrow, son percepciones que no se adecúan a la realidad del mundo que nos circunda.
Más allá de ser entretenidas, o meros juegos, también nos ayudan a comprender muchas cosas relacionadas sobre cómo opera nuestro cerebro, sobre todo cuando se trata de reconstruir el entorno.
Así, queda demostrado con estas ilusiones que nuestros ojos no funcionan como cámaras que observan fielmente la realidad, sino que, durante el proceso, nuestro cerebro interviene para interpretar esa información y tratar de darle un significado.
En muchos casos, los datos que nos proporcionan los sentidos no son suficientes, así como cuando percibimos ilusiones ópticas, entonces, nuestro cerebro, en su mejor intento por comprender, simplemente queda confundido.
La reconstrucción que hacemos del mundo no siempre es exacta, sino defectuosa, tal como ocurre con la ilusión óptica de Jastrow. Pues, ya nos hemos percatado que, en ciertas ocasiones, la información puede ser ambigua, y entonces no sabemos si estamos viendo a una anciana o a una mujer joven, a un pato o a un conejo.
Algunas ilusiones son tan impresionantes, como la de Zöllner, que solo se requieren unas pocas líneas y entonces nuestro cerebro es inducido al error, llegando a ver líneas rectas que parecen inclinarse.
El mecanismo de las ilusiones ópticas
La ilusión de Jastrow también se puede obtener de otras maneras, similares a la original, es decir, cuando colocamos dos objetos iguales con mucha proximidad. En estos casos, la disposición siempre favorecerá más a uno que a otro y veremos, o creeremos ver, que hay uno más grande que el otro.
De acuerdo con Lazzari, en su investigación sobre los aportes que han hecho las ilusiones ópticas a diferentes campos del conocimiento, hay un tipo de ilusiones ópticas que pertenecen a aquellas que están clasificadas como distorsiones.
En el caso de las distorsiones, los errores ocurren por el tamaño, la curvatura, la longitud, los ángulos o alguna otra propiedad geométrica, lo cual podría ser una posible explicación para la ilusión óptica de Jastrow.
La autora también indica que casi todas las pinturas, dibujos y fotografías, que representan una perspectiva, están incluidas dentro de esta categoría de ilusiones ópticas que se dan por distorsiones, ya que también conllevan una deformación, en la medida que se modifican las proporciones asociadas a los ángulos y a las dimensiones.
Así como también ocurre en aquellas ilusiones ópticas en las que se “aparenta” profundidad y distancia, es decir, tridimensional, siendo que, originalmente, la figura es bidimensional, o plana.
El mundo de las ilusiones ópticas
La ilusión óptica de Jastrow también es similar a otro tipo de ilusiones, como la de Adelson, que se caracterizan por una alteración o confusión entre el tamaño aparente de los objetos.
Comprender el mecanismo con el que operan las ilusiones ópticas es tan importante que, muchos ingenieros viales, por ejemplo, se dedican a su estudio, ya que, de ocurrir algo semejante en una calle podría desencadenar accidentes terribles.
En la ilusión óptica de Jastrow, también se podría agregar que el proceso de inhibición lateral juega un papel importante, ya que este mecanismo neurológico nos permite determinar la procedencia de un estímulo visual, en la medida que inhibe otros estímulos que están alrededor, y que puedan “interferir” con el objeto focal.
Esta sería una posible razón sobre el porqué nuestro cerebro se enfoca en un punto, u objeto, y decide ignorar otros aspectos que están alrededor.
Sin embargo, queda mucho por descubrir, pues, el maravilloso mundo de las ilusiones ópticas es tan apasionante como infinito.
- Camí, J., & Martínez, L. M. (2020). El cerebro ilusionista: La neurociencia detrás de la magia. RBA Libros.
- Lazzari, L. L., Moulia, P. I., & Gervasoni, A. I. (2016). Aportes de las ilusiones ópticas a diferentes campos del conocimiento. Cuadernos del CIMBAGE, (18), 81-107.
- Micelli, M. L., & Crespo, C. (2011). Las figuras de análisis en el aula de matemática.
- Portiansky, E. L. (2013). Análisis multidimensional de imágenes digitales. Universidad Nacional de La Plata.