El Efecto Hawthorne es un fenómeno psicológico descubierto entre los años 20 y 30 por el psicólogo Elton Mayo. En la planta Hawthorne de la empresa Western Electric, Mayo realiza experimentos en los que da cuenta de cómo la naturaleza de las relaciones sociales de los trabajadores y jefes influye en la productividad.
Este efecto concluye que cuando los empleados de una organización se sienten supervisados y tomados en cuenta mantienen mayores niveles de rendimiento y productividad laboral. Por tanto, se recomienda implementar estrategias que incentiven la comunicación y relaciones sociales positivas entre jefes y empleados.
El Experimento en la planta Hawthorne
Entre los años 1924 y 1933, fueron efectuados una serie de estudios de psicología laboral en la planta Hawthorne, correspondiente a la compañía de ingeniería eléctrica Western Electric. Estos experimentos fueron llevados a cabo por el psicólogo Elton Mayo y su equipo conformado por JF Roethlisberger y William Dickson. Así, las investigaciones tenían por objeto conocer cómo opera la conducta humana en situaciones de trabajo.
Entre los estudios realizados, uno de los más relevantes consistió en utilizar los niveles de iluminación en el área de trabajo como variable para medir la productividad. En este sentido, se tomó como población a un grupo de obreras que tenían como tarea el montaje de piezas telefónicas. Entonces, dado que el objetivo era ir variando las condiciones laborales, se cambió a las trabajadoras a una habitación especial, escasamente iluminados. Y, se les exigió laborar durante muchas horas sin ningún tipo de descanso. Como resultado, las mujeres tuvieron un rendimiento mucho mayor que en condiciones laborales más favorables y cómodas.
En ese punto, para los investigadores surge una gran duda respecto a qué lleva a las obreras a ser más productivas laboralmente. En primer lugar, se determina que las condiciones ambientales como la iluminación no fueron realmente el factor determinante en el aumento de su productividad. Más bien, las trabajadoras se sintieron “seleccionadas” e “importantes” al haber sido elegidas para participar en una tarea especial. También, al encontrarse en una habitación exclusiva para ellas, mantenían un excelente contacto social entre ellas. Además, tenían relaciones óptimas con el supervisor, llevándolas a tener la libertad de organizar su ritmo de trabajo y labores.
En qué consiste el Efecto Hawthorne
A raíz del experimento anteriormente planteado, los investigadores concluyen que realmente la motivación laboral está determinada por las relaciones sociales. En este caso, el aumento en la calidad y la producción de las trabajadoras se hallaba en la buena comunicación que mantenían entre ellas y con sus jefes. Finalmente, podemos entender el efecto Hawthorne en el ámbito laboral como un aumento en el rendimiento cuando el trabajador se siente tenido en cuenta e incluso supervisado.
Actualmente, las empresas cuentan con bases teóricas provenientes de la psicología organizacional que les permiten comprender los procesos de socialización laboral. De este modo, tienen la oportunidad de implementar estrategias que lleven a que se produzcan resultados convenientes. Desde tal premisa, el Efecto Hawthorne puede generarse cuando se les provee a los empleados de situaciones novedosas, sacarlos de la rutina con situaciones innovadoras.
También, es necesario que los trabajadores se sienten tomados en cuenta y que su esfuerzo es valorado. Tal reacción psicológica puede lograrse mediante refuerzos e inventivos constantes, no es necesario esperar a que el trabajador cumpla con un gran trabajo. Más bien, se recomienda aprobar las pequeñas acciones positivas con refuerzos verbales o remuneraciones económicas que motiven al empleado. Además, es necesario supervisar y vigilar el trabajo de los trabajadores de una empresa cada cierto tiempo, esto les permitirá sentir que no están trabajando solos. De acuerdo con el efecto Hawthorne, el obtener un feedback frecuente ayudará a la persona a sentirse más motivada a continuar con su trabajo.
El teletrabajo y el Efecto Hawthorne
En épocas de pandemia por COVID-19, el Home Office o trabajo en casa se vuelve sumamente popular, siendo la única modalidad en que muchas empresas pudieron mantenerse. Aunque actualmente no existan restricciones y las personas tienen la libertad de salir de sus hogares, muchas empresas han decidido mantener el Home Office. Principalmente, el trabajo desde casa tiene la particularidad de generar menores gastos para la organización y mayor flexibilidad para los empleados.
Sin embargo, según las premisas del Efecto Hawthorne, el teletrabajo generaría dificultades para mantener la motivación laboral. Especialmente, supondría un descenso en los niveles de eficiencia en tanto los empleados no se sentirían constantemente supervisados. Así, como estrategia para la motivación, el teletrabajo no ayudaría a mantener buenas relaciones sociales ni impulsaría a consecuencias positivas en la productividad.
Tomando en cuenta lo anteriormente planteado, se recomienda mantener una modalidad de Home Office parcial. Es decir, una buena parte del tiempo los empleados trabajarían desde sus hogares pero, ciertos días de su semana deberán dirigirse a su centro laboral. De esta manera, podrán obtener los beneficios psicológicos de un trabajo presencial y la flexibilidad de un teletrabajo.
- Aquije, C. (2018). Home Office como estrategia para la motivación y Eficiencia Organizacional. Universidad de Palermo. Extraído de: https://www.palermo.edu/economicas/cbrs/pdf/pbr18/PBR_18_17.pdf
- Calderón, G., Serna, H. Álvarez, C., Naranjo, C. (2019). Sentido y significado de la socialización organizacional. Revista Espacios. Vol. 40. Nº 3. Extraído de: https://www.revistaespacios.com/a19v40n03/a19v40n03p08.pdf
- Hart, C. (2012). Los experimentos de Hawthorne. Revista Cubana de Salud Pública. Extraído de: https://www.scielosp.org/pdf/rcsp/2012.v38n1/156-167