Los proverbios chinos son pequeñas enseñanzas que nos pueden ayudar a entender mejor el mundo y a afrontar las dificultades del día a día. En este artículo te resumimos algunos de los principales proverbios chinos. ¡A disfrutarlos!
Los mejores proverbios chinos
Presta tanta atención a tu interior como la que prestas a tu imagen.
Tu voluntad debe ser más poderosa que tus deseos.
La tristeza siempre llegará a ti en algún momento, es algo que no puedes evitar; pero sí puedes no dejar que se instale en tu vida.
Asume tus responsabilidades y soluciona el problema cuando seas tú quien lo ha creado
Tener miedo a sufrir es ya en sí un sufrimiento.
Puede ser más complicado cambiar la personalidad de una persona que el propio curso de la naturaleza.
Evita tener secretos si no quieres ser esclavo de ellos.
Si no tienes miedo, no tienes por qué estar preocupado.
El peor enemigo es el que no va de frente.
No esperes a que haya un problema, evita tener que buscar una solución.
No es más listo el que más dice, sino el que más calla.
No pasa nada si vas despacio, pero no te detengas.
No pienses en cómo hacerlo; simplemente, hazlo.
Es necesario tener una medida de las cosas, pues los excesos no son buenos.
La experiencia es la mejor instrucción para el hombre.
El camino más largo comienza dando un primer paso.
Piensa en lo que tienes en este momento, el futuro está en el aire.
No pidas amor, gánatelo.
El trabajo y la constancia son los que te llevarán a ser lo que desees.
Todo proyecto en equipo necesita de un liderazgo.
No hay nada que sea malo o bueno, dependerá de cómo lo utilicemos.
Un día puedes estar arriba y ser grande, pero si no trabajas por mantenerlo, pueden devorarte los más pequeños.
Ayudar a los demás es ayudarte a ti mismo.
El tiempo es como el agua de un río: nada permanece, siempre es diferente.
No hay curas infalibles para lo que no tiene remedio. La ciencia no hace milagros.
Las pequeñas piedras del día a día serán una montaña en el futuro.
El tiempo no vuelve, así que aprovecha la oportunidad y la energía que hoy tienes, pues en el futuro la echarás de menos.
No temas a tener errores, pues estos serán los que te enseñen a no tenerlos.
Presta atención a los pequeños errores, ya que pueden tener grandes consecuencias.
Toma decisiones con templanza y no te dejes llevar por las emociones.
Las experiencias negativas te ayudarán a no cometer los mismos errores en el futuro.
No puedes evitar que las aves de la tristeza pasen por encima de tu cabeza, pero puedes evitar que hagan un nido en tu cabello.
Para llegar a grandes metas, a veces es necesario coger los caminos más difíciles.
Preocúpate por los demás y tendrás tu recompensa.
Si quieres llegar a buen puerto, sal de tu zona de confort y no te acomodes.
Ve tranquilo y sin hacer ruido y llegarás adonde quieras.
Aprender a depender de ti mismo es una apuesta a largo plazo; depender de los demás solo te da seguridad hoy.
El tiempo cambia y también lo hace la persona. Por lo tanto, no hay dos momentos iguales.
Si alguien hace algo repetidamente, no es algo excepcional; es su tendencia.
Cualquier camino es bueno si no sabes cuál es tu destino.
Si recibes amor, serás poeta; si eres pobre, serás ladrón.
En definitiva, los proverbios chinos son ideales para relativizar y aprender a tomarnos la vida como una oportunidad continua para crecer. Es el momento de tomar nota de ellos y dejar que estas enseñanzas guíen tu vida. ¡Seguro que si lo haces consigues llegar muy lejos!