La psicopatología es la ciencia que estudia el comportamiento anormal, así como sus causas y características principales. Mucho camino se ha recorrido hasta hacerla una ciencia destacable y respetable en el mundo científico. En este artículo te presentamos a los padres fundadores de la psicopatología. Y, aunque haya algunos más, te exponemos los principales y sus aportaciones más representativas.
Los padres fundadores de la psicopatología
A continuación, te presentamos a aquellas personas que cimentaron las bases de lo que hoy es una ciencia viva y en contínua expansión. No lo tuvieron fácil, pero algunas de sus investigaciones nos ayudaron a comprender mejor el comportamiento humano casi sin medios, de ahí el mérito de su trabajo.
Johann Weyer

Johann Weyer (1515-1588), médico neerlandés, se suele nombrar como el padre de la psiquiatría, ya que fue él quien hizo una crítica opositora oficial a la demonología en su libro «De Praestigiis Daemonum». Weyer propuso la necesidad del tratamiento médico y fue uno de los precursores de la psicoterapia basado en el tratamiento terapéutico, interpretación/comprensión y observación de conductas. Influyo en el campo medico psiquiátrico, para los enfermos que anteriormente habían sido considerados como brujos.
Franz Anton Mesmer

El alemán Franz Anton Mesmer (1734-1815) defendió el poder y la existencia del inconsciente, pero no logró desarrollar su idea. Era partidario de la idea de que los fenómenos somáticos y mentales del ser humano estaban influenciados por fuerzas externas e internas. Además, decía que el hombre poseía fuerzas magnéticas. Promocionó el uso y la expansión de la hipnosis como método terapéutico y sugestivo.
Realizaba sus tratamientos mediante la colocación de imanes en el cuerpo de sus pacientes, para inducir una «corriente artificial» que aliviaría los síntomas.
Concluyó que era imposible que, únicamente mediante imanes, se hubiesen curado los síntomas, por lo que hipotetizó que el ser humano poseía por si mismo un acumulado de fluido magnético. Éste se liberaría con la ayuda de los imanes empleados, a lo que denominó como «magnetismo animal’’.
Morel y Magnan

En el siglo XIX el «organicismo» tuvo gran impacto en la psiquiatría y el análisis de las enfermedades mentales. Griesinger, en 1845, hizo énfasis en la importancia capital de los daños provocados en el cerebro, en detrimento de las llamadas»variables culturales». Siguiendo esta línea, los franceses Morel y Magnan completan la idea localizacionista de los trastornos en el cerebro, con su «teoría degenerativa».
La teoría degenerativa consistía en el deterioro genético, que daría lugar a una «involución» progresiva que iría desde la neurosis hasta la psicosis, terminando en la total incapacidad intelectual.

Se decía que este proceso era degenerativo debido a que las personas afectadas no tenían opción a alguna cura. Además, sostenían que tenía un factor hereditario que iría empeorando con las futuras generaciones. Esta teoría fue aceptada por varios profesionales, aunque a finales de siglo fue perdiendo influencia, ya que la herencia -por sí sola- no era suficiente para explicar toda la casuística presente en la época.
Emil Kraepelin: Tal vez el más importante de los padres fundadores de la psicopatología moderna
El doctor Emil Kraepelin, un importante psiquiatra alemán del siglo XIX, va a ser muy influyente en la psiquiatría moderna. Es el creador de un nuevo esquema de clasificación de las alteraciones mentales, las cuales sirvieron como base para los sistemas actuales. Para realizar esta clasificación no se basó en el estudio de las lesiones en áreas específicas del sistema nervioso, sino más bien en las alteraciones que se manifestaban de forma clínica con respecto al comportamiento.

Algunos de sus aportes más importantes son:
- Publicación de «Psiquiatría’’ texto que cuenta con nueve ediciones
- Define a la demencia precoz dependiendo de la cronicidad de su curso y la diferencia de la psicosis maniaco depresiva
- Demostró la importancia de la observación durante el transcurso de una patología en el tiempo (estudios longitudinales).
Phillipe Pinel
En Francia, después de la Revolución Francesa, aparece uno de los exponentes más importantes en la psiquiatría, Phillipe Pinel, quien se desarrolló como director del hospital de La Bicétre y luego en La Salpétriere.

Se encargó de darle un trato adecuado a los enfermos y mejoró varios aspectos de estos centros, desde la infraestructura y decoración hasta la moralidad, pasando por la alimentación y la higiene.
Sus contribuciones más importantes son la clasificación de síntomas dependiendo de los trastornos y la práctica del tratamiento moral.
Pinel planteó tres principios para llevar a cabo el «tratamiento moral»: ser empático con el paciente y mostrar comprensión, sentir condolencia por el paciente y dar alternativas junto con formas de aliento para proveer confianza de llevar un mejor estilo de vida gracias a la interacción con la sociedad.
El propósito de este tratamiento era «estabilizar» al enfermo a través de su propio razonamiento y contenido académico del médico, para de esta manera incentivar al análisis de los aspectos que partían del trastorno. Los resultados de este tipo de intervención fueron inmediatos y sobresalientes.
Este autor se encargó de clasificar los tipos de locura en su primera obra «Nosographie Philosophique»:
- Melancólica: alteración del desempeño intelectual
- Manía: excitación exagerada con o sin delirios
- Demencia: trastornos en el pensamiento
- Idiocia: Daño de capacidades intelectuales y afectos
Este investigador, aunque poco conocido, es uno de los principales padres fundadores de la psicopatología, junto con Kraepelin.
Jean Étienne Dominique Esquirol

Este discípulo de Pinel, continúa el trabajo de su maestro y promueve a la psiquiatría como una ciencia más específica.
Esquirol da una nueva visión basada en recopilación de información obtenida de distintos casos expuestos de formas estadísticas con estructura sistemática con el fin de evaluar el progreso de los pacientes tras iniciar el proceso terapéutico.
Al ser codirector de La Salpétriere, se relaciona con el área médica y, de esta manera, logra establecer relaciones con la anatomopatología. Además de estos aportes fundó otros centros psiquiátricos en Francia, y trabajó como docente de esta nueva doctrina.
Peña-Herrera, B. (2018) Psicopatología General. Samborondón: Universidad Espíritu Santo – Ecuador.