Tony Robbins es un orador motivacional y autor de libros autoayuda más populares y reconocibles en el mundo.
Biografía de Tony Robbins
Nació en estados Unidos en el seno de una humilde familia de origen croata. Los primeros años de su vida estuvieron marcados por el divorcio de sus padres y varios matrimonios posteriores de su madre. A los siete años, tras el divorcio de sus padres, fue adoptado legalmente por Jim Robbins, el primer nuevo compromiso de su madre. Cambiando así su nombre de Anthony J. Mahavorick a Anthony Robbins. Su padrastro, que trabajaba como vendedor, tuvo problemas muchos para cuidar de la familia y muchas veces ni siquiera podía permitirse el lujo de celebrar Acción de Gracias o Navidad.
La vida en el hogar de Anthony estuvo siempre marcada por el caos y por la falta de cariño, lo que él mismo definía como un ambiente negativo y abusivo. Su vida da un giro a los 17 años cuando decide irse de casa para nunca volver, después de que su madre lo echara amenazándolo con un cuchillo.
Anthony Robbins entró en el mundo de la autoayuda promoviendo los seminarios de Jim Rohn. “La felicidad y el éxito no son el resultado de lo que tenemos, sino de cómo vivimos. Lo que hacemos con las cosas que tenemos hace la gran diferencia en nuestra calidad de vida”. Según Robbins, esta fue la más grande enseñanza que pudo obtener de Rohn.
Es autor de varios libros de éxito, incluyendo, “Poder Sin Límites” y “Pasos de gigante” entre muchos otros. Ha entrenado a algunas de las personas más exitosas en el mundo, incluyendo Oprah, Andre Agassi, Leonardo DiCaprio y Bill Clinton para nombrar unos pocos. Aunque sus técnicas de estilo de entrenamiento y enseñanza son controvertidos, sigue siendo una de las personalidades más populares del mundo.
Estas son algunas de las citas más poderosas e inspiradoras de Tony Robbins que pueden ayudarte a cambiar tu vida.
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Frases de Tony Robbins
Si haces lo que siempre has hecho, obtendrás lo que siempre has conseguido.
Las cosas no tienen un significado. Nosotros asignamos un significado a todo.
Cuando eres agradecido, el miedo desaparece y la abundancia aparece.
La voluntad de preparación de la oportunidad genera la descendencia que llamamos suerte.
Todos los avances personales comienzan con un cambio en las creencias.
Tu pasado no es igual a tu futuro.
El secreto del éxito es aprender cómo usar el dolor y el placer en lugar de que el dolor y el placer te usen a ti. Si haces eso, tendrás el control de tu vida. Si no, la vida te controlará a ti.
En la vida, mucha gente sabe qué hacer, pero pocos hacen lo que hacen.
Por qué vivir una vida ordinaria, cuando se puede vivir una vida extraordinaria.
He llegado a creer que todo mi pasado y frustración se basaban en la comprensión que ha creado el nivel de vida que ahora disfruto.
Tu destino se forma con tus momentos de decisión.
Vamos a actuar en consonancia con nuestra visión de lo que realmente somos, tanto si esta opinión es correcta o no.
No se trata de la meta. Se trata de crecer en convertirte en la persona que puede lograr esa meta.
El éxito está enterrado en el otro lado del rechazo.
No hay grandeza sin una pasión para ser grande, tanto si se trata de la aspiración de un atleta o un artista, un científico, un padre o un hombre de negocios.
No es lo que hacemos de vez en cuando lo que da forma a nuestras vidas, es lo que hacemos consistentemente.
Si no se puede, es necesario hacerlo. Si es necesario, se puede.
El éxito es hacer lo que queremos hacer, cuando queremos, donde queremos, con quien queremos.
Donde va el foco de nuestra atención, fluye la energía.
Para que los cambios tengan un valor real, tienen que ser duraderos y consistentes.
Una decisión real se mide por el hecho de que has llevado a cabo una nueva acción. Si no hay acción, no has decidido.
Las cosas no tienen sentido. Asignamos significado a todo
En la vida necesitas inspiración o desesperación.
Sólo aquellos que han aprendido el poder de la alegría más profunda, la experiencia sincera y desinteresada en la contribución a la vida, conocen la verdadera realización.
La calidad de tu vida es la calidad de tus relaciones.
Céntrate en hacia dónde quieres ir, no en lo que temes.
Nuestras creencias sobre lo que somos y lo que podemos ser pueden determinar precisamente lo que podemos ser.
Identifica tus problemas, pero da tu poder y energía a las soluciones.
Si no puedes, debes y si debes, puedes.
Podemos cambiar nuestras vidas. Podemos hacer, tener y ser exactamente lo que deseamos.
Tu vida cambia el momento en que tomas una decisión nueva, congruente y comprometida.
Las únicas personas sin problemas son las que están en los cementerios.
Son tus decisiones, no tus condiciones, las que determinan tu destino.
La gente que fracasa se centra en lo que tendrán que pasar, la gente que triunfa se centra en cómo se sentirán al final.
El único viaje imposible es el que nunca empiezas.
Es lo que practicas en privado por lo que serás recompensado en público.
La falta de emoción provoca falta de progreso y falta de motivación.
No puedes dar en el blanco si no sabes cuál es.
Debemos actuar consistentemente con la visión de quiénes somos realmente, sea esa visión correcta o no.
La decisión de comprometerte con resultados a largo plazo en lugar de soluciones a corto plazo, es tan importante como cualquier decisión que vas a tomar en tu vida.
Nunca nadie logró una meta al estar interesado en su logro. Uno debe estar comprometido.
Estoy convencido de que la mayoría de la gente fracasa en la vida, sencillamente, porque pone mucho interés en cosas menores.
Permanece comprometido con tus decisiones, pero flexible en tu enfoque.
Las creencias tienen el poder de crear y el poder de destruir. Los seres humanos tenemos la habilidad de tomar cualquier experiencia de nuestras vidas y crear un significado que nos desanime u otro que, literalmente, salve nuestras vidas.
Establecer metas es el primer paso para convertir lo invisible en visible.
Lo primero que tienes que hacer en cualquier momento en que desees sinceramente producir un cambio, consiste en elevar tus criterios.
Los líderes son aquellos individuos que viven con creencias que les dan poder y que enseñan a otros a aprovechar sus capacidades, desplazando las creencias que les han limitado.
Lo que podemos o no podemos hacer, lo que consideramos posible o imposible, raras veces se encuentra en función de nuestra verdadera capacidad, sino que se trata más bien de una función de nuestras creencias acerca de quiénes somos.
La gente no es perezosa, simplemente tienen metas impotentes, metas que no les inspiran.
Una razón por la que pocos conseguimos lo que realmente queremos es que nunca dirigimos nuestro foco de atención; nunca concentramos nuestro poder.
Si quieres expandir tu vida, tienes que expandir tus referencias, persiguiendo ideas y experiencias que no formarían parte de tu vida si no las buscara conscientemente.
Una vez que domines el tiempo, se entiende cuán cierto es que la mayoría de la gente sobrestima lo que pueden lograr en un año, y subestiman lo que pueden lograr en una década.
Descubrí hace mucho tiempo que si ayudaba a las suficientes personas a conseguir lo que querían, yo siempre conseguiría lo que quisiese y nunca me tendría que preocupar.
El camino hacia el éxito es tomar acción masiva y determinada.
Las metas son como imanes. Atraen las cosas que los hacen realidad.
Para comunicar efectivamente, debemos darnos cuenta de que todos somos diferentes en la forma en que percibimos en mundo y usamos esa comprensión como guía para nuestra comunicación con otros.
Los líderes pasan el 5% del tiempo pensando en el problema y el 95% del tiempo pensando en la solución.
Nuestras creencias son como órdenes incuestionadas, que nos dicen cómo son las cosas, qué es posible y qué imposible, qué podemos hacer y qué no podemos hacer.
Todas las personas con éxito que conozco comparten la capacidad para permanecer centradas, con las mentes claras y poderosas en medio de las tormentas emocionales.
El único problema que realmente tenemos es que pensamos que se supone que no debemos tener problemas. Pero los problemas nos llaman a un nivel más alto, encáralos y resuélvelos.
No sólo tienes que decidir con qué resultados quieres comprometerte, sino también la clase de persona que te comprometes a ser.
El poder de leer un gran libro es que uno empieza a pensar como el autor.
La gente exitosa hace mejores preguntas, y como resultado, obtiene mejores respuestas.
Te desafío a que hagas de tu vida una pieza maestra. Te reto a que te unas a la gente que vive lo que enseñan.
La mayoría de la gente no tiene ni la menor idea de la gigantesca capacidad que somos capaces de desarrollar de forma inmediata cuando enfocamos todos nuestros recursos para dominar un solo aspecto de nuestras vidas.
No es lo que conseguimos, sino en lo que nos convertimos, en qué contribuimos y lo que da significados a nuestras vidas.
Una de las razones por las que pocos de nosotros alcanzamos lo que realmente deseamos, es que nunca dirigimos nuestro foco de atención hacia un punto concreto; nunca concentramos nuestro poder.
Observa las malas hierbas con una sonrisa en el rostro, sabiendo que su existencia ha terminado, por la sencilla razón de que él las ha visto y estás dispuesto a actuar inmediatamente para eliminarlas.
¿En qué clase de persona tendré que convertirme para alcanzar todo lo que deseo?
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