Las frases nos ayudan a inspirarnos, a entendernos y a comunicarnos. Son una muy buena forma de expresar lo que sentimos y lo que pensamos, tanto si es positivo como negativo. En esta ocasión hacemos una recopilación de frases de hipocresía, que seguro que te llamarán mucho la atención.
Esperamos que estas frases sobre la hipocresía que te ofrecemos a continuación te sean de utilidad. En algún momento de la vida tendrás que hacer frente a personas falsas e hipócritas que te hagan algún daño. Con algunas de estas frases sabrás responderles de una forma más sabia e inteligente.
Las mejores frases de hipocresía
Puedes reírte de mí, hablar de mí, odiarme… Pero la realidad es que lo que te sucede es que la envidia te consume por verme feliz.
Un consejo para echar de tu vida a una persona falsa es el siguiente: haz lo contrario de aquello que espere de ti. Verás qué poco tarda en marcharse.
Esa persona a la que se le llena la boca diciéndote que te quiere, a mí me decía “estaré contigo para siempre”
No juzgues aquello que no has vivido ni llegado a sentir.
Si no puedes vivir cerca de mí sin tratarme bien, entonces tendrás que buscar la manera de alejarte para siempre y dejarme en paz.
La felicidad y el placer no fueron inventados para ser disfrutados por los hipócritas.
Aquel que te lastima, te hace más fuerte; quien te critica, hace que seas más importante; y el que te envidia, te hace más valioso.
Las personas falsas son como simples maniquíes.
Los hipócritas se nutren del chisme, destruyen con su envidia y se mueren sin amigos.
Los peores lobos y a los que hemos de temerles son aquellos que llevan piel de humanos.
Nunca des nada por hecho.
La belleza exterior no siempre va unida a una belleza interior, y tú eres la prueba.
Prefiero estar rodeado de personas imperfectas que no lo ocultan, a quienes se esfuerzan por ser perfectas ocultando una parte de sí mismas.
Hay que aprender a conocerse a uno mismo y a identificar tus propios errores antes de condenar a los demás por los suyos.
Si quieres ser fiel a ti mismo y vivir en coherencia con tus pensamientos, has de ser aquello que aparentas.
Hay personas cuya falsedad alcanza tal magnitud que no llegan a ser conscientes de lo que piensan ni de si es cierto o no.
Si me echas de menos, ven a buscarme; si me quieres, demuéstramelo; y si te has ido, mejor no vuelvas.
La máscara de la mentira luce atractivos inexistentes. Aprende a detectarlos.
Cuídate bien de las aguas silenciosas y de los perros que no ladran.
La hipocresía es tan común y cercana a la verdad que la persona prudente no debe ubicarse en terreno resbaladizo.
No te preocupes, yo también sé olvidar.
Hay quienes exigen sinceridad, pero se molestan si les dices la verdad. Te pregunto directamente, ¿prefieres ser ofendido con mi sinceridad o que te mienta?
Hay quienes bromean para decir la verdad, mientras que otras hablan seriamente para mentirte.
Me alegra conocerte, ya sé que no debo de fiarme de esas sonrisas falsas amigas mentirosas.
Mucha gente no te escucha mientras hablas, solo espera con paciencia su turno para hablar.
No te preocupes por quienes te odian, preocúpate por aquellos que fingen que te aman.
Te trataré sin rencor, pero no olvides que tengo memoria.
Júzgame a tu manera. Tú tienes tu opinión, pero la realidad es la mía.
La única persona a la que debes ser leal es a ti misma.
No paras de criticarme, pero me envidias y acabas imitándome.
La verdad duele, pero la mentira mata.
No te preocupes por quienes te odian, mejor preocúpate por esos que fingen que te aman.
Puedes hablar mal de mí todo lo que quieras, pues al final tú no eres quien me alimenta ni me mantienes.
Te llenas la boca hablando para después tener la cabeza vacía.
Te acepto la disculpa y te retiro la confianza.
Tus enemigos publicarán tus fracasos, pero no se harán eco de tus logros.
No tengo rencor por nadie, lo único que me sucede es que las personas como tú me resultan molestas.
Lo peor de las mentes cerradas es que siempre tienen las bocas abiertas. No pueden permanecer callados.
No confíes en cualquier palabra, pues hay personas que saben fingir muy bien.
Te perdono por odiarme tanto, pero perdóname tú por importarme tan poco tu vida.